La pasada jornada del 10 de junio estuvo marcada por la celebración del III CURSO DE ACTUALIZACIÓN EN PATOLOGIA DE LA MANO, organizado por el Centro Regional Murciano de Ortopedia y Traumatología en el "Iltre. Colegio Oficial de Médicos de la Región de Murcia".

El Dr. Alarcón Gonzalez, Director Gerente del Servicio Murciano de Salud, y D. Rodolfo Castillo Wandossell, Presidente del Colegio Oficial de Médicos, acompañaron al Dr. Albaladejo Mora y el Dr. García Novalvos en la mesa inaugural del Curso.

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Los avances que se han alcanzado durante los últimos años en la traumatología y ortopedia posibilitan recuperar la fisonomía y funcionalidad de manos, dedos y muñecas tras una fractura, y aún en casos complejos, cuya resolución era impensable hace poco tiempo.
Precisamente, con la idea de poner sobre el tapete y recordar que existe un amplio abanico de posibilidades terapéuticas en esta materia, el Centro Regional murciano de Ortopedia y Traumatología realiza el III curso de actualización en patología de la mano, el jueves 10 de junio, en el Colegio Oficial de Médicos.
Esta actividad está especialmente dirigida a los médicos de atención primaria, familiar y comunitaria, ya que son ellos quienes normalmente “reciben al accidentado en primera instancia”, señala el doctor Antonio García Novalvos, jefe del servicio de cirugía ortopédica y
traumatología (COT) de la clínica Virgen de la Vega y codirector del curso.
La disponibilidad de tornillos, placas y dispositivos cada vez más sofisticados y precisos hace realidad no sólo la consolidación del hueso roto, sino que el paciente esté en mejores condiciones para restablecer la fuerza y movimiento normal de su mano herida.
Desde siempre, ante una fractura el tratamiento conservador no invasivo (colocación de vendas
o escayola) más la posterior rehabilitación “tardaba unos 120 días, en el caso de una fractura
diagnosticada como ‘buena’; el mismo caso, si se practica la intervención, se resuelve en 20
días”, compara el doctor García Novalvos.
Además, aclara que esa operación requiere sólo de un día de hospitalización y “el paciente comienza casi de inmediato con la fisioterapia”.
Este tipo de cirugías comenzaron a realizarse de modo regular hace aproximadamente tres años en la clínica Virgen de la Vega: “Somos un servicio que nos gusta estar al día con el seguimiento de las nuevas técnicas, pero que ya constituyen hechos probados de buen funcionamiento y con buenos resultados en otros grandes centros”, añade el especialista.

Más opciones

Además de las placas y tornillos, también existen los implantes y los injertos como alternativas de resolución de algunos casos que se presentan.
El motivo central del curso apunta a reforzar la idea entre los médicos de familia de que existen
“más posibilidades terapéuticas por fuera de las convencionales, que hay más opciones por las que se puede alcanzar mayor eficacia en los resultados”, afirma el doctor García Novalvos.
En el caso de los implantes, por ejemplo, no se trata de “dar falsas expectativas al paciente, porque no todo es implantable, pero si lo es, saber, por ejemplo, cómo debe transportarse la pieza
(dedo), que no debe meterse en hielo, sino en suero frío para no dañarlo más”, explica el jefe de servicio COT, de la Clínica Virgen de la Vega.
Prácticamente ante ningún caso deben cerrarse, a priori, las expectativas de tener una buena calidad de vida, tras haberse afectado la mano (o parte de ella) en un accidente.
La amputación será siempre el último recurso y, “para nosotros un fracaso”, remata el doctor Antonio García Novalvos, codirector del curso.